María Pérez-Yglesias

/ Costa Rica

Nace el 10 de abril de 1949. Catedrática jubilada de la Universidad de Costa Rica estudia Filología, Linguística y Literatura (UCR) y obtiene un Doctorado en Comunicación y semiótica, en la Universidad Católica de Lovaina, Bélgica, en 1982. Investigadora y docente es co-fundadora del Centro de Investigación en Cultura e Identidad Latinoamericana, dirige la Maestría en Literatura, el Decanato del Sistema de Estudios de Posgrado (1996-2004) y la Vicerrectoría de Acción Social (2004-2012). Lidera el semanario Comunidad y escribe las columnas “Pensar y reír” (Diario Extra) y “Cartas a María” (La Nación), durante siete años cada una. Madre de tres hijos y siete nietos participa activamente en proyectos de acción social, como evaluadora y conferencista, dirige múltiples tesis y es autora de más de cien publicaciones académicas entre las que se destacan los trabajos sobre humor, caricatura e historieta, valores políticos, mass media, historia local, crítica literaria, literatura costarricense, semiótica, literatura infantil… Empieza a escribir literatura – cuentos, relatos infatiles, novelas, poesía- después de los cincuenta. Actualmente es evaluadora de textos, visita grupos en escuelas y colegios con el tema de la lectura y escritura y hace entrevistas en los programas de Radio Universidad, Compartiendo la Palabra y En primera persona. Con Valeria Varas se encarga de la parte costarricense de una antología centroamericana de próxima publicación. Actualmente investiga sobre mujer e impacto cultural. Participa en dos talleres literarios Poiesis y Noche de Letras, pertenece a la Junta Directiva de la Asociación Costarricense de Escritoras (ACE) y experimenta con dos géneros nuevos: microrelatos y cuentapoemas, con temas como la violencia infantil, la guerra, lo fantástico y la persona adulta mayor

LA ESPERA DEL MAR

El mar nos vigila
desde lo lejos
asumiéndose faro.

Nos quiere rechazar,
como rechaza con enojo
esas descuidadas
moles petroleras
que riegan
su color esclavo
de bilis sin historia.

Nos recuerda Atlántico,
a vos y a mí,
cuando repasa
las historias milenarias
de emigrantes,
tratando de alcanzar
la tierra prometida.

Nos invoca
sombras de rodillas
frente al sol insistente.

Aburrido de relatos,
el mar
guarda silencio.

Caribe intenso
nos confunde,
remos de balseros,
alcanzando ilusiones
convertidas en plegarias
por volver
al punto de partida.

Del poemario: Bailamos con el mar (EUCR, 2018)