Heinrich Helberg Chávez

/ Perú

Le gusta entenderse como un poeta-filósofo cuya poesía es la contraparte de su conocimiento conceptual. Como artista se mueve libremente entre la plástica y la poesía escrita. Nació en Lima en 1949, padre de origen alemán y madre peruana. Su infancia transcurrió entre un hogar peruano de muy limitados recursos económicos y el colegio peruano-alemán de Lima, donde aprendió a hablar alemán, ya que su padre falleció muy pronto y no lo conoció sino por fotos. Pero creció en una tensión cultural a la que se agregó lo que pudo saber de las culturas antiguas del Perú, que le llamaban mucho la atención. Descubrió la pintura como medio de expresión desde los cinco años y desarrolló una pasión por pintar, que pronto lo colocó en una relación tensa con su medio social que no entendía su inclinación por los experimentos formales de un van Gogh o Picasso. En la adolescencia descubrió la poesía y compartió sus primeros poemas con sus compañeros de colegio, entre ellos con Juan Abugattas y con el poeta Javier Sologuren, quien publicó uno de sus caligramas en su revista Creación & Crítica. Es fundamentalmente auto didacta. Recién a inicios de los años 70 se sintió dueño de su propio estilo: con una poesía para tocar, cortar, quemar, que había ido más lejos que nadie con su primer poemario Juegos para soñar. En los años 70 escribió tres poemarios, pero solo Juegos para soñar se publicó con el sello editorial de La Rama Florida de Javier Sologuren, y le trajo un inmediato reconocimiento.